Mi obra compositiva

Mi catálogo compositivo es versátil y está formado por obras de muy diferente motivación. Unas en un lenguage más o menos relacionado en la tradición histórica y que llamo música pura. Otros con una temática inspirada en temas sociales, otras de carácter contemplativo y por fin un apartado de inspiración pedagógica. En la presente relación he ido colocando cada partitura en el apartado correspondiente. Según su intencionalidad y tipo de escritura. Así, en cuanto a música pura -siempre he tenido un compromiso con la tradición histórica- hay un buen número de obras ya desde el inicio de mi carrera compositiva: destaco el ‘Concierto para violín y orquesta’, ‘Concerto grosso’, ‘ Sonata in cinque tempi’ para violín, ‘Sonata a la memoria de Pau Casals’ para violonchelo, ‘Divertimento 2002’, Cuarteto de cuerda ‘Remembrances’, ‘Cuarteto San Petersburgo’, ‘Sonata para viola’, ‘Concierto para piano y orquesta’, ‘Duo-Sonata’ para violín y piano, ‘Sonata para trompeta’, ‘Impromptu-Fantasía’ para órgano,Trío ‘Le Matin’ para piano, violín y violonchelo, y un buen número de otras partituras que se reparten en diferentes géneros.

Muy particulares son los dos apartados que siguen. Mientras en el anterior siempre hay un control estructural, de forma, de unidad, de lógica discursiva, etc., en los dos que mencionaré entramos en un campo de absoluta libertad expresiva y cada obra será fruto de la imaginación y de diferentes impulsos interiores. Sólo y hacia la coherencia expresiva. El primer apartado está integrado por obras sobre la violencia humana en todos los ámbitos. A modo de ejemplo debo mencionar en primer lugar ‘Secuencias sobre una muerte’ del año 1970, obra que abriría este apartado. A continuación vendría ‘Anna Frank, un símbolo’ (1971) para cuerdas, a la que siguen dos obras para gran orquesta: el poema dramático ‘Ybris’ (palabra griega que hace referencia a la violencia) y la reciente ‘Natura-contranatura’. Estas dos partituras, de una estética que puede considerarse expresionista, tienen la particularidad de un clima cambiante centrado en la prepotencia y dureza de la irracionalidad humana. La prepotencia y la conformación.

El segundo apartado es en cambio, como una liberación. Una evasión de la realidad que me traslada a la contemplación de un mundo ideal. Un mundo libre de la brutalidad humana y que me permite explorar espacios abiertos, sea la naturaleza con sus fenómenos naturales, la recreación de un concepto científico o simplemente viajar en un espacio abierto. La primera obra de este género es ‘Vers l’infinit’ (Hacia el infinito), de 1982-83, un poema sinfónico inspirado en la poesía “El infinito” de Giacomo Leopardi. ‘Formas para una exposición’ sería otra partitura que me abriría la imaginación. En esta obra, realizada con la colaboración de mi amigo Jorge Wagensberg, se describen ocho de las formas más frecuentes de la naturaleza, cada una de las cuales ocupa un movimiento. ‘Legenda’ para viola o violín solo, también nos traslada en un espacio casi metafísico así como también ‘Iscor’ para violín y viola, pregaria de origen hebreo que se refiere a los seres queridos ya lejos de este mundo. Una obra reciente de este apartado es ‘Entre el so i la reflexió’, para piano, que se desarrolla en un espacio imaginario.

El último apartado comprende partituras de inspiración o intencionalidad pedagógica. Ya de siempre, y debido a mi vinculación con el violín, he encontrado una fuente de inspiración sea en los inumerables ejercicios de técnica que en los estudios progresivos escritos por Kreutzer, Rode, Fiorillo, Mazas, Dont, Wieniawski y de manera especial los que escribió Eugen Ysaÿe bajo el título de ‘Ejercicios y Escaleras’. Tantos años de practicar este material es lógico que de manera inconsciente aparezcan motivos o alusiones en muchas de mis obras sea de música pura como en las de los otros dos apartados. Pero en este último, que divido en dos bloques, es cuando este material se hace más evidente.

Así, en el primer grupo de inspiración pedagógica pertenece la obra ‘Dos movimientos’ para cuarteto o orquesta de cuerda, en el que el segundo movimiento ‘Allegro-Studio’ está directamente inspirado en los ejercicios de mecanismo y técnica de arco del tan conocido violinista checo Otokar Sevcik. Como es sabido, Sevcik fue el pedagogo que más fórmulas y ejercicios aportó a la técnica del violín. También a este grupo pertenece ‘Perpetuum mobile’ para violín y piano, ‘Tremolo’ para clarinete, ‘Souvenir’ para viola, los ‘Etudes nach Kreutzer’ para cuarteto de cuerda, y recientemente ‘Il Diavolo’ para violín y piano basado en el ‘Capricci nº 13’ de Paganini, conocido como ‘la risata del diavolo’.

Un último grupo lo forman obras de intencionalidad pedagógica, que es muy diferente de las obras del mencionado grupo. Intencionalidad pedagógica es toda otra cuestión. Durante años fui profesor de violín. Mi contacto con jóvenes violinistas en plena formación me llevó a una inmersión pedagógica muy intensa. Y de ahí la decisión de escribir obras de un cierto grado virtuosístico que además de un interés musical fueran sobre todo de interés pedagógico. Y fue así como poco a poco fui inventando nuevas fórmulas basadas en una escritura que facilitara la ejecución. Es decir, conseguir en un pasaje complicado-intrincado, el mismo efecto a base de una escritura lo más simplificada posible. Que produzca un efecto virtuoso utilizando lo que yo llamo ‘técnica natural’. El violinista Emilio Moreno en su ensayo sobre mi aportación al violín español del siglo XX comenta cuando hace el análisis de la ‘Sonatina’ para violín solo: “… es una obra eminentemente violinística por la perfecta adecuación de los medios técnicos a la voluntad expresiva. De la manera más natural y espontánea posible, Cervelló crea un espejismo técnico que el estudiante avanzado agradece, inventando unas piezas de carácter virtuosístico, brillo y una bien estudiada proporción de los recursos, para producir un efecto más ‘difícil’ de lo que es en realidad”.

Ya en el año 1991 compuse una obra concebida y destinada al progreso de los estudiantes en cuanto a la técnica del arco. Eran los ‘Cinco golpes de arco fundamentales’ extraídos del método de violín sobre técnica de arco creado por pedagogo francés Georges Catherine. Los cinco golpes de arco son los siguientes: ‘gran détaché seco’, ‘martellé’, ‘détaché soutenu ou chantant’, ‘détaché vif’ y ‘sautillé’. La obra está escrita para orquesta de cuerda y va destinada a estudiantes de grado medio. Esta partitura figura en el plan de estudios de diferentes conservatorios. Y hay que decir también que es una obra que ha sido ejecutada como pieza de concierto. Después de esta primera aportación irán apareciendo obras ya de concierto. La primera de ellas fue ‘Concertino para violín y cuerdas’ escrito en 1993 seguida de los ‘4 Capricci’ para violín solo, los ‘Divertimentos I y II’ para dos violines, ‘Grażyna’ para violín solo y ‘Entre deux’ para viola y violonchelo.

Jordi Cervelló Garriga